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Autenticidad mexicana al siguiente nivel

Diseño de empaque

México: territorio en el que abunda la multiplicidad de formas, texturas, tonalidades y perspectivas que nos otorgan una identidad única ante el mundo; una identidad tan rica en diversidad que parece imposible la tarea de encapsular lo mejor de ella para llevar a un producto enteramente mexicano al siguiente nivel.

Para el equipo de Top Design esta tarea no fue imposible. Fue un símbolo de compromiso con la visión nacional y el posicionamiento de la marca, logrando en este profundo proyecto de investigación y diseño, una imagen final para Danone que aterrizó en su totalidad la autenticidad mexicana que el proyecto requería.

Con aras en presentar una línea de producto fabricada con ingredientes endémicos de los estados a las que el yogurt iba a representar dentro del territorio mexicano, el primer reto fue conocer a profundidad la riqueza cultural de cada región para generar una imagen reconocible pero al mismo tiempo atractiva y dinámica para el mercado en el que competiría.

Así comienza un extenso trabajo de investigación por parte de Top Design, para encontrar elementos representativos de cada región en categorías que iban desde la gastronomía, hasta el arte, la historia, la flora y fauna y demás ramos que sentaron las bases para el proceso creativo de un producto final que fuera fiel al alma de cada estado.

Inspirados en los tradicionales bordados mexicanos, el equipo comenzó a generar una textura que rescataba los mejores elementos de la cultura visual mexicana: la explosión de colores, el juego en la diversidad de formas y la celebración de lo barroco que atrapa la vista de cualquier persona en anaqueles cada vez más competidos.

Aunado a este reto de representatividad (elegir para la textura solo cinco de los tantos elementos que representan a cada estado) el equipo debía dar los primeros pasos hacia la transformación del empaque Danone, que por años tuvo un característico tono azul que ahora avanza hacia los blancos como factor de diferenciación y como un esfuerzo por otorgarle frescura y vanguardia a la marca.

El resultado final, después de un arduo esfuerzo por generar las texturas idóneas, fueron 5 diseños para 5 estados distintos, en los que vive la riqueza cultural de cada región, representada en una textura que además de expresividad debía tener equilibrio y congruencia visual con el diseño general del empaque.